Esta técnica al principio era solo usada para grandes sectores industriales pero debido a las necesidades de los usuarios se ha extendido hasta adecuarlo al comercio mas pequeño. Básicamente consiste en plasmar el diseño que poseen nuestras láminas en la pieza objeto que queramos personalizar.

En este proceso se utiliza un film de papel de polivinilo soluble en agua, el cual con el proceso necesario reacciona y se convierte en tinta que se añade perfectamente con el diseño elegido al objeto deseado. Posteriormente la pieza debe ser lacada, para así dotarla de brillo y maximizar su durabilidad.

Disponemos de un departamento externo de patrones y modelos de alta impresión, por lo que si además necesitas algún diseño personalizado… ¡también podemos hacerlo!